jueves, 25 de septiembre de 2014

William Faulkner, un recuerdo de su vida y obra, en el día de su nacimiento



William Faulkner

25 de setiembre de 1897, New Albany, Misisipi-

6 de julio de 1962, Byhalia, EE. UU.

 

Si quieres conocer acerca de las personas, lee a Dostoyevsky. Si quieres saber de vos mismo, lee a Faulkner.  


Faulkner, famoso fumador de pipa, muchas veces fotografiado con una de ellas.
¿Podría haberse inspirado sin esta compañía? 
¿Haber escrito esas historias maravillosas? 
¿Inventado un condado con un nombre imposible de pronunciar?



William Faulkner, un gigante de la literatura estadounidense y del mundo

Siguiendo sus pasos... de escritor

 


El reconocido escritor de Mississippi, el ganador del Premio Nobel 1949, el aclamado novelista y narrador, es leído en cada rincón del mundo, en cada universidad, en cada taller literario, en cada casa,... por escritores, alumnos y lectores que disfrutan como él explora, articula y desafía las profundas verdades del alma.

Odiaba que la gente se inmiscuyera en su vida privada, de una manera entrometida o para conseguir alguna migaja de fama.
Como lectora, lo que más me atre saber, es cómo llegó a escribir esto o aquello, de dónde salieron sus personajes, el ambiente que lo rodeaba, su vida en relación a su obra.


Hay una pregunta dando vueltas...


 Faulkner escribió dos grandes obras que todos recordarán, la novela The Sound and the Fury / El ruido y la furia [1929] y Go Down, Moses/ Desciende, Moisés, colección de cuentos de 1949.
 
El periódo entre estas dos fechas fue el más productivo y rico.
 
¿Cómo pudo un hombre joven, que no terminó el colegio secundario, que no accedió a un título universitario, que trabajó desde la adolescencia y vivía en una pequeña ciudad del estado más pobre de la nación,... Cómo pudo escribir durante la Gran Depresión [y lo que esto significaba], estas novelas increíbles que, por otro lado transcurren, todas, en el mismo pequeño condado sureño?
 
Fueron los años de las grandes obras: As I Lay Dying/ Mientras agonizo [1930], Light in August / Luz de agosto [1932] y sobre todo, Absalom, Absalom! / ¡Absalón, Absalón! [1936].
 
Por estas obras fue y es reconocido entre los mejores escritores del siglo XX.


Su inspiración, un Falkner sin la «u»...


Era el primero de cuatro hermanos. Mejor que nombrar a sus padres —nombres que olvidarían y pueden hallar en cualquier enciclopedia—, no es que no lo merezcan, voy a detenerme en su bisabuelo.
De él heredó su nombre, William. 

El «viejo Coronel» había fallecido ocho años antes de su nacimiento. Se había enfrentado con su ex socio en un duelo en las calles de Ripley, Mississippi.
—Al menos, es lo que cuentan las crónicas. ¿Será otra de las inexactitudes imputables a Faulkner?
El «William bisabuelo» fue abogado, político, hacendado, empresario, coronel en la Guerra Civil, ferroviario, y finalmente y lo que más me importa destacar: ¡escritor!

Escribió novelas, poemas, cuadernos de viaje y hasta una obra de teatro. Su obra más famosa fue la novela, best-seller, The White Rose of Memphis / La rosa blanca de Memphis.

El bisabuelo, aún muerto y sin haber compartido su tiempo, lo influenció enormemente. Fue su modelo, tanto en la vida personal como profesional. Y también fue modelo e inspiración para el personaje del coronel que aparece en las novelas y relatos: Sartoris [1929] y su edición ampliada: Banderas en el polvo [1973]; también en El Invicto [1938].

Es así como este personaje iba a originar, sin saberlo, las historias de County Yoknapatawpha, condado ficticio, al que Faulkner llamaba «my apocryphal county».
 
Pero el bisabuelo de apócrifo nada, sí existió y se llamó William Clark Falkner.


Amor y poesía...


William demostró una sensibilidad especial y talento artístico para expreserla a una edad temprana, ya sea dibujando o escribiendo poesía. Pero los estudios, sobre todo el colegio, lo aburrían mortalmente.

Sus primeros trabajos literarios eran más bien románticos. Sus modelos eran los poetas Robert Burns* [1759-1796], el más conocido en el lengua escocesa; el poeta y dramaturgo escocés James Thomson* [1700-1748], famoso por su poema «Las estaciones / The Seasons»; el poeta y erudito clásico inglés, Alfred Edward Housman [1859-1936], cuya obra más conocida es Cuando cumplí los veintiuno. Por último cito al controvertido, poeta decadente inglés, Algernon Charles Swinburne [1837-1909].
Como verán, todos ellos de Inglaterra y Escocia.

En esta época de juventud y lecturas tuvo dos influencias remarcables, una, como no podría ser de otra manera, un amor: Estelle Oldham, una chica muy popular en Oxford [de Misisipi], vivaz y con una vida social muy activa. Lamentablemente, y en una situación algo confusa, termina casándose con otro. La otra gran influencia fue su amigo y mentor literario, Phil Stone, con quien compartía el gusto por la poesía. Phil notó inmediatamente el talento de William, lo estimuló, aconsejó y orientó en sus lecturas.
Ambos, Estelle y Phil, tuvieron un importante rol en su futuro.
 

También lo tuvo su tierra, aunque aún no lo sabía...



  
Lejanas colinas azules, en las que me he deleitado,
a las que sigue la primavera con pies de plata y el manto
de los cornejos floridos, entonando el «¡Amante!» del pájaro azul,
mientras me dirijo al divisado camino.

Colinas de Misisipi: Mi Epitafio


Far blue hills, where I have pleasured me,
where on silver feet in dogwood covered
Spring follows, singing close the bluebird´s «Lover!»
When to the road I trod an end I see. 

Mississippi Hills: My Epitaph




El cambio de nombre, y algunos engaños «inofensivos»...


Su amigo Phil lo ayuda con su decepción amorosa y lo invita a mudarse a New Haven, donde Faulkner tuvo su primer trabajo. Allí su apellido Falkner se transformaría en el que todos conocemos, posiblemente por un error tipográfico.
 
De ahí en más, comenzó a adoptarlo, porque le gustó, quizá creía que sonaba más British. Después de todo, imitaba ya ese acento y solía cambiar su nacionalidad hacia esa dirección.

Durante la guerra, él estaba entrenando en Toronto, cuando finalizó su entrenamiento militar, también había finalizado la guerra. Nunca estuvo en combate.
 
Sin embargo, cuando volvió a Oxford, en diciembre de 1918, contó muchas historias, vestido con su traje de oficial [oportunamente comprado] con alas y charreteras: aventuras exageradas, incluso daños físicos sufridos, ¡todas ficciones!

Pero... esas «ficciones» rendirían unos frutos más que acepatables, servirían en su futura ficción escrita, sobre todo en su primera novela, Soldiers´ Pay / La paga de los soldados*, de 1926.


El paso por la universidad y los trabajos varios...


Contando las historias de «veterano de guerra» —disfrutando de este halo de valentía impostado—,  aprovechó un plan universitario especial, otorgado a los auténticos ex soldados. Se inscribió en la Universidad de Misisipi en Oxford, aunque nunca había terminado el secundario.

Para esa época publica en The New Republic, su primer libro de poemas, L´Apres-Midi d´un Faune [sic; La tarde de un fauno].
 
Mientras era estudiante en Ole Miss [como también se llama a la Universidad de Misisipi], publicó poemas y relatos en el diario del campus; escribió incluso una obra de teatro que nunca fue representada.
 
Pasados tres semetres, abandonó los estudios una vez más [noviembre 1920].

En los años siguientes, Faulkner escribió críticas, poemas y trabajos en prosa. Tuvo todo tipo de ocupaciones.
 
Uno de ellos en la ciudad de Nueva York. Fue asistente en una librería dirigida por Elizabeth Prall, quien más tarde sería la esposa del escritor de cuentos, maestro del relato corto, Sherwood Anderson [1876-1941].

Otro trabajo, y quizá el más conocido, fue el de jefe de correos de la Universidad. Bueno, fue muy mal empleado, se pasaba todo el tiempo leyendo o jugando a las cartas con sus amigos, traspapelaba las cartas o las perdía directamente, tampoco atendía bien a los clientes.
 
Frente a un inspector que lo investigó, no le quedó otra opción que renunciar.
 
En ese tiempo hubo otra renuncia, al Oxford Boy Scout Troop. En este caso la causa fue caratulada: «moral reasons». Probablemente se refería al alcohol.


Ambiente literario...


Su amigo Phil Stone lo ayuda con la publicación del libro de poemas, The Marble Faun / El fauno de mármol [1924], con una edición de mil copias y escribiendo el prefacio.
 
Al tiempo, Faulkner se muda a New Orleans, donde se encuentra con gran cantidad de escritores. Con el ya nombrado Sherwood Anderson [1876-1941], autor de una colección de cuentos realistas e insólitos que lo llevaron a la fama, como: Winesburg y Ohio [1919]. Popularidad etiquetada con el mote exagerado de «autor escabroso». En realidad fue el primer escritor norteamericano, que en los tiempos de Whitman [1819-1892], afrontó el tema de la sexualidad.

Además de él, otros muchos que giraban alrededor de la revista literaria The Double Dealer. Muy conocida por publicar los primeros trabajos del poeta Hart Crane [1899-1932], del novelista Ernest Hemingway [1899-1961; Fiesta, Adiós a las armas, Por quién doblan las campanas, El viejo y el mar], del crítico y novelista Robert Penn Warren [1905-1989, uno de los fundadores de la Nueva Crítica; miembro fundador de la Fraternidad de Escritores del Sur] y del conocido crítico literario Edmund Wilson [1895-1972].

Aquí me detengo. Los trabajos críticos de Wilson, que iban más allá de lo estricto y convencional, hicieron que autores como Ernest Hemingway, su amigo John Dos Passos [1896-1970], ... «Dos y Hem», era como se llamaban entre ellos [aunque anduvieron de disputas un tiempo], William Faulkner, F. Scott Fitzgerald [1896-1940, El gran Gatsby, A este lado del paraíso, El curioso caso de Benjamin Button], y Vladimir Nabokov [1899-1977, Lolita, Pálido fuego, Ada o el ardor] tuviesen el primer acercamiento y aceptación del público.
¡Nada menos que estos nombres de la literatura!

Faulkner publicó varios ensayos y sketches, reunidos bajo el nombre New Orleans Sketches, en The Double Dealer y en el New Orleans Times-Picayune.
 
Escribió su primera novela, Soldiers´Pay / La paga de los soldados, que cuenta la historia de un piloto de la Primera Guerra Mundial, que regresa a su casa en Georgia cuando nadie lo espera ya que lo creían muerto.
Y desde New Orleans, Faulkner se embarcó rumbo a Europa.


Conocer nuevos países, Europa...


Llegó a Italia un 2 de agosto, pero viajó a Francia y estableció residencia cerca de París, en la zona del Jardín de Luxemburgo, Luco, como lo llaman cariñosamente los parisinos.
 
Pasaba mucho tiempo en este lugar. Las descripciones del parque maravilloso, diseñado por orden de María de Médicis, con sus terrazas y estatuas, el ambiente tan plácido para relajarse, aparecería más tarde en su novela Sanctuary / Santuario, [1931].
 
[Aunque la novela no sería nada relajante, escalofriante y perturbadora para la época más bien. Hoy la van a encontrar impactante, macabra pero una maravilla de la que me ocuparé más adelante].

Antes, en una de sus cartas había escrito: «Acabo de escribir algo tan bonito que estoy a punto de estallar: 2000 palabras sobre la muerte y los jardines del Luxemburgo. Tiene un sutil reto argumental, sobre una mujer joven, y se trata de poesía aunque esté escrito en prosa. He trabajado en ello durante dos días enteros y cada palabra es perfecta. Apenas he dormido en dos noches, pensando en ello, comparando las palabras, aceptándolas o rechazándolas, y cambiándolas de nuevo. Pero ahora está perfecto; una joya. Voy a dejarlo a un lado por una semana. Luego lo mostraré a alguien para que me dé su opinión. Así pues, mañana me levantaré hecho polvo, supongo. La reacción. Pero merece la pena haber hecho algo así».


¿Mereció la pena esta lectura, no? Su pasión y entusiasmo, su prosa creada con la libertad y desobediencia de la poesía, o su poesía hecha de prosa, la opinión de los otros, él mismo.
 
 «He llegado a considerar el Luxemburgo como mi jardín actual...», así se había apasionado con el parque parisino, este rincón tan encantador y que muchos hemos visitado.

También solía frecuentar el mismo café donde iba James Joyce [1882-1941], pero nunca se animó a hablarle, tal era su timidez.

Después de visitar Inglaterra, en diciembre, vuelve a su hogar, es hora de estar y escribir en su tierra,  EE. UU.


Volver al Sur: New Orleans, «The Big Easy» ...


Otra vez instalado en New Orleans, comienza con su segunda novela, Mosquitoes / Mosquitos [1927], una sátira de l´ambiance literario que frecuentaba. En la actualidad, es considerada una de las más flojas.
 
Sin embargo, a él le sirvió porque siguió el valioso consejo de su amigo Anderson, el de escribir acerca de su lugar. Haciendo esto, diseñó una geografía combinando la puramente regional con la histórica de su familia, especialmente la relacionada con su bisabuelo y sus aventuras bélicas en la Guerra Civil o Guerra de Secesión [1861-1865].


«El lugar»: Yoknapatawpha


Es así como surge «Yocona County»/ Condado de Yocona, que más tarde sería rebautizado «Yoknapatawpha».

Años más tarde, exactamente en 1956, en una entrevista explicaba el efecto liberador que había tenido la creación de un lugar ficticio, como artista y escritor.
 
Empezar con Sartoris fue descubrir que valía la pena escribir sobre el pequeño lugar donde había nacido. Sintió que nunca se agotaría esa fuente de inspiración, y lo más importante, al sublimar estos lugares o situaciones comunes, llevandólos al campo ficticio, le dieron una completa libertad, un vuelo donde podría llevar su imaginación al máximo.




Puente cubierto sobre el Río Yocona, fotografía de 1900. Uno de los tantos de Lafayette County. Mapas viejos describen el barroso y lento río, y lo llaman el río «Yockney-patafa», de donde Faulkner sacó el nombre de su condado ficticio. Esta foto, con las mulas tirando de la carreta, recuerda el nefasto cruce del inundado río Yoknapatawpha de la novela As I Lay Dying/ Mientras agonizo.



Sus primeras novelas...


Su novela Flags in the Dust / Banderas sobre el polvo no fue aceptada por su editor, a pesar del entusiasmo de Faulkner. Comenzó entonces a ofrecerla a otros, pero con resultados similares.
 
Mientras tanto empezó a escribir otra novela, por placer, sin pensar en su posible publicación.
Con muchos recortes y arreglos, la novela Sartoris fue publicada en 1929.
 
Flags in the Dust sería publicada recién en 1973, más de 10 años después de su muerte.

Contrariamente a lo que pensaba, la novela escrita «por mero placer» fue encontrada «publicable», aunque tuvo que convencer a sus nuevos editores, J. Cape and Harrison Smith, para que no interfirieran con el manuscrito. No estaba dispuesto, esta vez, a modificarlo.

Fue una novela [ya diré el nombre] que revolucionaría en estilo y contenido. Dividida en cuatro partes, las primeras tres contadas por los hermanos de una familia tradicional. Empieza Benj, un «idiota», un débil mental que no tiene mucha noción del tiempo. Su relato es alterado cronológicamente, sin previo aviso para el lector, excepto por el usual cambio de letra a cursiva. Para él todo ocurre en un mismo instante.

Individualmente, cada una de las partes se revela desde un punto de vista estilístico y de exploración de los personajes.
 
Y las cuatro partes juntas operan como un todo, para mostrar la lenta decadencia de lo que en un tiempo había sido, una de las familias más prominentes del sur.
 
Influido por el Ulises de James Joyce, narra el descenso social, el final de un viejo linaje del tradicionalista sur de Estados Unidos, el famoso Deep South, o sur profundo.



Florida, Georgia, Carolina del Sur, Carolina del Norte, Virginia, Alabama, Tennessee, Kentucky, Luisiana, Misisipi, Arkansas,



Esto es mostrado explícitamente por los tres hermanos de Caddy Compson, la hermana y la única del grupo que no habla. Sí lo hace, en la última parte, otra mujer, pero ella no es miembro de la familia. Vive con ellos y es la sirvienta negra.
Ella es en realidad «la voz» de Faulkner.

Los tres hermanos varones son muy distintos, por lo tanto, así será la visión que nos brindará cada uno de los personajes.
 
Benjamín, Benjy, el menor, «la verguenza de la familia» por su retraso mental, nos brinda un relato sin reacción, como una cámara registrando acontecimientos. Faulkner usa la técnica libre fuir de la conciencia. A Quentin corresponde el segundo de los relatos, es el hijo más inteligente, pero también el más torturado. Le sigue el relato de Jason, el menos simpático de los Compson, el más directo. Él refleja claramente la vida doméstica de la familia y los intereses económicos.
 
Por último, el cuarto relato, el único contado en tercera persona y focalizado en Disley, la típica sirvienta negra que tantas veces hemos visto en películas. Ella contrasta, por su gran energía y fe, con el resto de la familia.
 
Como verán, una estructura narrativa polifónica, donde los hechos son contados desde distintos puntos de vista.

Tomó el título de un soliloquio de Macbeth, de Shakespeare, en el que se refiere a la vida como «un cuento contado por un idiota». Faulkner llamó a la novela The Sound and the Fury / El ruido y la furia. Fue publicada en 1929 y es considerada su obra fundamental.


Apremios económicos...


Después de esta publicación, Faulkner tuvo que focalizar su atención en ganar dinero. Unos años antes había escrito Sanctuary / Santuario, que a causa del tema sórdido fue inmediatamente rechazada por el editor.
 
Sus necesidades económicas aumentaban porque su familia se agrandaba.
 
Estelle Oldham, su antiguo y primer amor, se había divorciado del Coronel Franklin y unos meses después... se casaban. Estelle trajo dos niños de su anterior matrimonio al nuevo hogar: Malcom y Victoria.
 
Faulkner empezó a trabajar en las noches en una central eléctrica.
 
Mientras tanto, escribió As I Lay Dying / Mientras agonizo, realmente un tour de force, una proeza, escrito en seís semanas y sin cambiar una palabra.



Otra familia de ficción, otra gran novela...


Como The Sound and the Fury / El ruido y la furia, la novela anterior, As I Lay Dying / Mientras agonizo, se focaliza en una familia. Está contada con la técnica llamada «stream-of-conscioosness», o monólogo interior, que presenta los pensamientos y sentimientos del personaje tal cual aparecen en él. Este flujo interior se manifiesta a veces, en largos soliloquios, son reflexiones sin interlocutor.

En lugar de tomar a una familia aristocrática, ahora se ocupa de una familia de granjeros de la localidad sureña «Yoknapatawpha County», los Bundrens, cuya matriarca, Addie, ha muerto y ha pedido ser enterrada en Jefferson, a un día de viaje duro hacia el norte.
 
Este viaje está cargado de dificultades, peligros de incendios e inundaciones. Emergen emociones profundas de dolor y pérdida de los miembros de la familia.
 
As I Lay Dying / Mientras agonizo fue publicada en 1930 y es aclamada y considerada una obra maestra de la literatura [Harold Bloom].


Este año 1930 fue muy significativo para Wiiliam Faulkner por otras dos razones...


  Fin de la primera parte


*     *     *
 

Voy a detenerme acá, veo que ya hay en esta página mucha información, aunque también veo que es una vida tan rica en cuanto a creación literaria y entorno, que creo y espero, disfrutarán como yo.

Este es parte de mi paseo por el universo faulkiano. Siempre teniendo en cuenta que la información, aunque venga de primera mano, la que el mismo Faulkner proporcionó, es mezcla de realidad y de ficción.
 
Falta saber de los momentos y circunstancias que rodearon a las otras grandes novelas, saber de cómo fue guionista en Hollywood o de su fama en Europa y sus premios.

No había mencionado [ya lo haré en la segunda parte], quizá porque huyo un poco de la palabra «boom», que Faulkner pertenece al grupo de intelectuales famosos llamados de «la Generación perdida». Podría ser un dato que aleje a futuros lectores, dejándose llevar por la etiqueta de «escritor difícil», el que explora «el lado oscuro del ser humano» el de los múltiples narradores, el que usa [magnificamente] el «stream-of-consciosness», además de la fusión de los tiempos.
No es poco.

Sin embargo, ¿es un impedimento cuando hay tanto talento? Además, como en muchos escritores que lo sucedieron encontramos su huella, puedo asegurar que su lectura no será compleja para los que ya tengan cierta gimnasia lectora, y estoy segura que disfrutarán de su exuberancia, estilo y fuerza.
De sus personajes fuertes e ideas originales.

Otro aspecto importante es que, aunque pueda parecer una realidad lejana a nosotros, el tema de la aristocracia sureña estadounidense y los habitantes del norte industrial... veremos que son historias, rivalidades y antagonismos profundos entre regiones de una misma nación que se repiten en otros tiempos, geografías y contextos históricos. Nos daremos cuenta que Yoknapatawpha, el mítico condado sureño inventado por Faulkner como escenario para sus novelas, no es un mero universo ficcional, y los personajes y narradores que lo pueblan representan o comparten con otros la necesidad de recomenzar sobre bases diferentes.

Mucho del carácter del individuo, que no puede escapar a su destino, sigue siendo lo mismo. Frente a los cambios sociales, económicos y políticos debe ir hacia un futuro incierto. Manejar la tensión y el conflicto, encontrar las señas de la identidad que alguna vez se tuvo, ir por la vida con la herencia cultural a cuestas, traspasar las propias barreras individuales, aceptar todo esto, nunca será fácil.

Espero que se apasionen con esta «nueva» lectura o renueven las ganas de leerlo.
Dedicado en el día de su nacimiento,

C. G.



Aquí estoy yo, reescribiendo este post y preparando mis lecturas para el estudio de Faulkner.



Mis notas, lecturas, links, sitios de interés, información ofrecida:


- The Mississippi Writers Page: la mayoria de la información proviene de mis lecturas en inglés de esta página del Departamento de Inglés de la Univeridad de Misisipi.
 http://www.olemiss.edu/mwp/


- A Faulkner Glossary: glosario/vocabulario en la obra de Falkner.
 http://www.mcsr.olemiss.edu/~egjbp/faulkner/glossarya.html


 - Más información sobre Faulkner: William Faulkner on the Web
http://www.mcsr.olemiss.edu/~egjbp/faulkner/faulkner.html


- Cartas escogidas, William Faulkner: Edición y selección a cargo de Joseph Blotner. Traducción de Alfred Sargatal y Alicia Ramón. Alfaguara.


- Poesía reunida, William Faulkner: Edición bilingüe, agrupa, por primera vez, los cuatro libros de este género publicados por Faulkner: El fauno de mármol [1924], Una rama verde [1933] y los póstumos Poemas de Misisipi [1979] y Helen: un cortejo [1981].

 Dijeron sus traductores Eduardo Moga y Daniel C. Richardson: «Faulkner, uno de los escritores capitales de la literatura norteamericana de todos los tiempos, renueva con sus poemas la anquilosada poesía de la época y la pone al día de la vanguardia universal, iluminado por el magisterio de los simbolistas franceses y de algunos de los mejores poetas de la lengua inglesa: Swimburne, Keats, Shelley y T. S. Eliot. Sus composiciones aspiran a la pasión y a la belleza».



- Lion in the Garden: Interviews with William Faulkner, 1926-1962. James B. Meriwether. University of Nebraska Press, 1980, 198 páginas.


- How to Read and Why, Harold Bloom: leer la parte dedicada a W. Falkner: As Lay Dying.
También se ocupa de: Antón Chéjov, Guy de Maupassant, Ernest Hemingway, Flannery O´Connor, Bladimir Nabokov, Jorge Luis Borges, Tommaso Landolfi e Italo Calvino, etc. 
Traducido es: Cómo leer y por qué.

Harold Bloom es un icono, posiblemente el crítico literario más leído. Este es un libro instructivo y práctico. Ofrece un análisis muy claro y preciado de las obras fundamentales de la literatura, de Shakespeare a Whitman, de Cervantes a Faulkner. ¡Recomendado a los lectores que van más allá de entretenerse con una novela!


- Película «Mientras agonizo»/ As I Lay Dying: Presentada en Cannes, en 1913. Adaptar esta novela al cine requiere un conocimiento profundo de la obra, y mucho valor. Dirigida y protagonizada por James Franco.
Para recrear la narración con diferentes puntos de vista usada por Faulkner, Franco usa el sistema de la pantalla partida. La misma escena vista por dos personajes diferentes.


- Entrevistas a William Faulkner:
 http://www.ciudadseva.com/textos/teoria/opin/faulkner.htm
 http://www.poemas-del-alma.com/blog/especiales/william-faulkner-entrevistas
 http://www.theparisreview.org/interviews/4954/the-art-of-fiction-no-12-william-faulkner


- Julian Maria: habla de Faulkner y recomienda su lectura:
http://www.rtve.es/alacarta/videos/escritores-en-el-archivo-de-rtve/javier-marias-habla-william-faulkner-1997/1453478/


- «¿Existe alguna fórmula posible para ser un buen novelista?», entrevista en video:



 



- Robert Burns, Official Page:
http://www.robertburns.org/


- La poesía inglesa... James Thomson:
http://revistadeliteratura.revistas.csic.es/index.php/revistadeliteratura/article/download/47/53


- Soldiers´ Pay / La paga de los soldados, Wiliiam Faulkner:
http://es.scribd.com/doc/191236721/William-Faulkner-La-Paga-de-Los-Soldados#scribd


- Biografía de William Faulkner, Joseph Leo Blotner: esta es la más apreciada de las biografías sobre Faulkner, escrita por Joseph Blotner. ¿Por qué es el biógrafo principal de Faulkner?
Blotner fue profesor en la Universidad de Virginia y allí se hizo amigo cercano de William Faulkner. En Virginia vivía la única hija biológica de Faulkner y la universidad había aprovechado esa circunstancia para invitar al escritor a dar una serie de charlas durante un semestre. Blotner, que asistía a esas reuniones como supervisor y como encargado de grabar en cinta magnetofónica las intervenciones, frecuentó durante esos años la casa de los Faulkner y el escritor le confiaría sus proyectos presentes y futuros. Tal es así, que fue Blotner fue uno de los que cargó el ataúd en los funerales de Faulkner. Faulkner disfrutaría tanto sus intercambios con universitarios que aceptaría volver los años siguientes desde su hogar en Oxford, Mississippi, a 1.232km de distancia, por un pago simbólico.

Fue determinante para la realización de esta biografía, la buena relación de Blotner con la familia Faulkner, así como su amplio conocimiento de la obra del escritor. Contra lo que podría suponerse, la biografía no es un retrato idealizado de Faulkner. El biógrafo trata todos los asuntos difíciles y escabrosos que atormentaron sus días: la convivencia durante décadas con el alcoholismo —decisivo en provocarle la muerte— y que revela que no sólo Fitzgerald se ganaba el premio de suicida mayor por causa del alcohol en la Generación Perdida a la que ambos pertenecían; los adulterios a vista y paciencia de la esposa —que los aceptaba como una fatalidad de su matrimonio mal avenido—, las opiniones negativas o contradictorias de otros escritores —Sherwood Anderson, Fitzgerald, Tennessee Williams y, sobre todos, Hemingway—, sus interminables discusiones sobre dinero para mantener a sus dos entenados, su hija, su esposa, su madre, la esposa y la hija de su hermano fallecido y los varios miembros de la servidumbre en su residencia de casi 12 hectáreas en Rowan Oak. Propiedad que su hija la vendería a la Universidad de Mississippi diez años después de muerto Faulkner. Como en las biografías de Balzac, la falta o la búsqueda de dinero es la necesidad más invocada en el libro y resulta inquietante comprobar que, a diferencia de sus novelas, todos los cuentos que escribió los hizo por ganarse unos dólares —dependiendo de la revista que los aceptaba, podían redituarle desde  37 a 2 mil dólares.

Aquí podrán conocer acerca de la recepción de los libros de Faulkner en vida, las relaciones de Faulkner con sus padres, hermanos, hijos, admiradores y detractores. Sus defectos mayores son contados, es necesario explicarlos para que el lector que los ignora, no se deje llevar por ellos.Pueden saltar esta parte y dedicarse a su vida en relación con su obra.

Blotner intenta transmitir lo que fue para Faulkner escribir cada capítulo de sus novelas, cada verso, cada página de cuento; es más recomendable leer los comentarios críticos de la prensa y de fuentes académicas.

Si bien William Faulkner, eterno ermitaño y celoso de su vida privada, se hubiera negado de plano a aceptar la existencia de una biografía como esta, no podemos sino agradecer su existencia. [Dice Augusto Wong Campos en su blog].
Aquí pueden leer parte de ella:
https://books.google.com.ar/books/about/Faulkner.html?id=efc_r6Zw-08C&redir_esc=y


 


martes, 23 de septiembre de 2014

Pablo Neruda, tres poemas


Elegidos de Odas Elementales.


Pablo Neruda

Premio Nobel de Literatura 1971

12 de julio de 1904-23 de setiembre de 1973, Chile

un recuerdo

 

  De cómo es vivir con un verso...

 

Oda a la crítica


Yo escribí cinco versos:
uno verde, 
otro era un pan redondo,
el tercero una casa levantándose,
el cuarto era un anillo,
el quinto verso era
corto como un relámpago
y al escribirlo
me dejó en la razón su quemadura. 

Y bien, los hombres,
las mujeres,
vinieron y tomaron
la sencilla materia,
brizna, viento, fulgor, barro, madera
y con tan poca cosa
construyeron paredes, pisos, sueños.
En una línea de mi poesía
secaron ropa al viento.
Comieron
mis palabras,
las guardaron
junto a la cabecera,
vivieron con un verso,
con la luz que salió de mi costado.
entonces
llegó un crítico mudo
y otro lleno de lenguas,
y otros, otros llegaron
ciegos o llenos de ojos,
elegantes algunos
como claveles con zapatos rojos,
otros estrictamente
vestidos de cadáveres,
algunos partidarios
del rey y su elevada monarquía,
otros se habían
enredado en la frente
de Marx y pataleaban en su barba,
otros eran ingleses,
y entre todos
se lanzaron
con dientes y cuchillos,
con diccionarios y otras armas negras,
con citas respetables,
se lanzaron
a disputar mi pobre poesía
a las sencillas gentes
que la amaban:
y la hicieron embudos,
la enrrollaron,
la sujetaron con cien alfileres,
la cubrieron con polvo de esqueleto,
la llenaron de tinta,
la escupieron con suave
benignidad de gatos,
la destinaron a envolver relojes,
la protegieron y la condenaron,
le arrimaron petróleo,
le dedicaron húmedos tratados,
la cocieron con leche,
le agregaron pequeñas piedrecitas,
fueron borrándole vocales,
fueron matándole
sílabas y suspiros,
la arrugaron e hicieron
un pequeño paquete
que destinaron cuidadosamente
a sus desvanes, a sus cementerios,
luego
se retiraron uno a uno
enfurecidos hasta la locura
porque no fue bastante
popular para ellos
o impregnados de dulce menosprecio
por mi ordinaria falta de tinieblas
se retiraron
todos
y entonces,
otra vez,
junto a mi poesía
volvieron a vivir
mujeres y hombres,
de nuevo hicieron fuego,
construyeron casas,
comieron pan,
se repartieron la luz
y en el amor unieron
relámpago y anillo.
Y ahora,
perdonadme, señores,
que interrumpa este cuento
que les estoy contando
y me vaya a vivir
para siempre
con la gente sencilla.



En la voz de Joaquín Sabina:




*     *     *


Oda al reloj de la noche

  

En la noche, en tu mano
brilló como luciérnaga
mi reloj.
su cuerda:
como un susurro seco
salía
de tu mano invisible.
Tu mano entonces
volvió a mi pecho oscuro
a recoger mi sueño y su latido.

El reloj
siguió cortando el tiempo
con su pequeña sierra.
Como en un bosque
caen
fragmentos de madera,
mínimas gotas, trozos
de ramajes o nidos,
sin que cambie el silencio,
sin que la fresca oscuridad termine,
así
siguió el reloj cortando
desde tu mano invisible
tiempo, tiempo,
y cayeron
minutos como hojas,
fibras de tiempo roto,
pequeñas plumas negras.

Como en el bosque
olíamos raíces,
el agua en algún sitio desprendía
una gotera gruesa
como una uva mojada.
Un pequeño molino
molía noche,
la sombra susurraba
cayendo de tu mano
y llenaba la tierra.
Polvo,
tierra, distancia
molía y molía
mi reloj en la noche,
desde tu mano.
Yo puse
mi brazo
bajo tu cuello invisible,
bajo su peso tibio,
y en mi mano
cayó el tiempo, 
la noche,
pequeños ruidos
de madera y de bosque,
de noche dividida,
de fragmentos de sombra,
de agua que cae y cae:
entonces cayó el sueño
desde el reloj y desde
tus dos manos dormidas,
cayó como agua oscura
de los bosques,
del reloj
a tu cuerpo,
de ti hacia los países,
agua oscura,
tiempo que cae
y corre
adentro de nosotros.
Y así fue aquella noche,
sombra y espacio, tierra
y tiempo,
algo que corre y cae
y pasa.
Y así todas las noches
van por la tierra,
no dejan sino un vago
aroma negro,
cae una hoja,
una gota
en la tierra
apaga su sonido,
duerme el bosque, las aguas,
las praderas,
las campanas,
los ojos.

Te oigo y respiras,
amor mío,
dormimos.


*     *     *


Oda a la fertilidad de la tierra

 

A ti, fertilidad, entraña
verde,
madre, materia, vegetal tesoro,
fecundación, aumento,
yo canto, yo, poeta,
yo, hierba,
raíz, grano, corola,
sílaba de la tierra,
yo agrego mis palabras a las hojas
yo subo a las ramas y al cielo.
Inquietas
son
las semillas,
sólo parecen
dormidas.
Las besa el fuego, el agua
las toca con su cinta
y se agitan,
largamente se mueven,
se interrogan,
abajo lanzan ojos,
encrespadas volutas,
tiernas derivaciones,
movimiento, existencia.
Hay que ver un granero
colmado, 
allí todo reposa
pero
los fuegos de la vida,
los fermentos
llaman,
fermentan, 
arden
con hilos invisibles.
Uno siente en los ojos
y en los dedos
la presión, la paciencia,
el trabajo
de gérmenes y bocas,
de labios y matrices.
El viento lleva ovarios.
La tierra entierra rosas.
El agua brota y busca.
El fuego hierve y canta.
Todo
nace.
Y eres,
fertilidad, una campana,
bajo tu círculo
la humedad y el silencio desarrollan
sus lenguas de verdura,
sube la savia,
estalla
la forma de la planta,
crece
la línea de la vida
y en su extremo se agrupan
la flor y los racimos.

 Tierra, la primavera
se elabora en mi sangre,
siento
como si fuera
árbol, territorio,
cumplirse en mí los ciclos
de la tierra,
agua, viento y aroma
fabrican mi camisa,
en mi pecho terrones
que allí olvidó el otoño
comienzan a moverse,
salgo y silbo en la lluvia,
germina el fuego en mis manos,
y entonces
enarbolo
una bandera verde
que me sale del alma,
soy semilla, follaje,
encino que madura,
y entonces todo el día,
toda la noche canto,
sube de las raíces el susurro,
canta en el viento la hoja.

Fertilidad te olvido.
Dejé tu nombre escrito
con la primera sílaba
de este canto,
eres tú más extensa,
más húmeda y sonora,
no puedo describirte,
ven a mí,
fertilízame,
dame sabor de fruto cada día,
dame
la secreta
tenacidad de las raíces,
y deja que mi canto
caiga en la tierra y suban
en cada primavera las palabras.


*     *     *


Sí, de cómo es vivir con un verso... que puede hasta ser corto como un relámpago, y sin embargo  dejarte en la razón su quemadura.

Estos tres poemas son del libro Odas elementales [1954], escritos en su madurez poética.
La oda es siempre una alabanza, en ese caso a tres temas muy distintos y que mucho me atraen: a la gente sencilla, separando, diferenciando al crítico del lector; al paso del tiempo implacable dejando su huella, a la brevedad... esta es la hora/ la gota de un instanre/ que arrastrará el pasado..., y al tiempo unido al amor de la mujer, un amor sereno y reposado en este caso; y por último, a la naturaleza rica y fértil, las riquezas de la tierra, nuestro encuentro y fusión con ella y su fecundidad.

Fueron elegidos  por su sencillez y espontaneidad, también por sus mensajes claros, directos; dirigidos al hombre, a la mujer que se conmueve con los sentimientos más elevados... Ves tú que simple soy, que simple eres...


C. G.


Mis notas:


- Odas elementales, Pablo Neruda: Editorial Seix Barral/ Planeta.

- Centro Virtual Cervantes: dedicado al poeta Pablo Neruda:.
 http://cvc.cervantes.es/literatura/escritores/neruda/

- Universidad de Chile, sitio dedicado a Pablo Neruda:
 http://www.neruda.uchile.cl/index.html

 - Fundación Pablo Neruda: fue creada el 4 de junio de 1986, en base al testamento de Matilde Urrutia, viuda del poeta.
La voluntad de crear esta Fundación aparece a comienzos de la década del cincuenta, cuando Neruda dona su biblioteca y colección de caracolas a la Universidad de Chile.
Su objetivo es difundir y preservar el legado poético, artístico y humanista del poeta. También cultivar y propagar el arte de las letras. Apoya la creación artística, en especial de las nuevas generaciones. Realiza actividades culturales, talleres y entrega premios. Promueve y facilita el encuentro y diálogo entre escritores, artistas y personas del mundo académico. También interactúa con organizaciones similares, nacionales y extranjeras.
http://www.fundacionneruda.org/es

- Las palabras de Pablo Neruda acerca de este libro:

«En las Odas elemntales me propuse un basamento original, nacedor. Quise redescribir muchas cosas ya cantadas, dichas y redichas. Mi punto de partida deliberado debía ser el del niño que emprende, chupándose el lápiz, una composición obligatoria sobre el sol, el pizarrón, el reloj o la familia humana. Ningún tema podía quedar fuera de mi órbita, todo debía tocarlo yo, andando o volando, sometiendo mi expresión a la máxima transparencia y virginidad».

Pablo Neruda, Confieso que he vivido
[Autobiografía, 1974] 





 








 




domingo, 14 de septiembre de 2014

Mario Benedetti, un día como hoy, 14 de setiembre...

Tus ojos son mi conjuro
contra la mala jornada...



En el día de su nacimiento:

Mario Benedetti

14 de setiembre de 1920-17 de mayo de 2009

 

 

Y por tu rostro sincero/ y tu paso vagabundo/ y tu llanto por el mundo/ porque sos pueblo te quiero.


A todos los benedettianos expertos, pido disculpas si soy inoportuna o cometo algún error [serán cientos], a los que disfrutan de leer a Mario Benedetti, de descubrir eso que no percibimos a simple vista y que él nos lo dice con encanto, les cuento:

                                                                     leer sus poemas, novelas, cuentos y ensayos, es algo que me da inmenso placer y siempre lo comparto, ahora lo recomiendo —consejo de más entre sus seguidores.
Mario Benedetti es el preferido de muchos. Su lectura conmueve. Su lenguaje se asemeja al tuyo y al mío. Si no lo leíste de una manera integrada, ahí está el puente,/ para cruzarlo o para no cruzarlo/ yo lo voy a cruzar/ sin prevenciones/ en la otra orilla alguien me espera...
Sin ninguna duda, uno de los imprescindibles.


—¿Qué significa Benedetti para vos?
No te apures a responder, antes recordá o enterate de todo lo que él pondría en esa «Botella al mar». Después de conocer sus preferencias, lo más importante será escuchar lo que nos dice.... pero en esta botella navegante/ sólo pondré mis versos en desorden/ en la espera confiada de que un día/ llegue a una playa cándida y salobre// y un niño la descubra y la destape/ y en lugar de estos versos halle flores/ y alertas y corales y baladas/ y piedritas de mar y caracoles.



 Ahora sí,  —¿Qué significa Benedetti para vos? ¿A cuál de los Benedettis preferís?

Al autor de ensayos, artículos, y entrevistas  [Peripecias y novela, 1943; El país de la cola de paja, 1960; Letras del continente mestizo, 1967; Sobre las relaciones entre el hombre de acción y el intelectual, La Habana 1968; Sobre artes y oficios, 1968; Los poetas comunicantes, 1972, entrevistas a poetas latinoamericanos de su generación; El escritor latinoamericano y la revolución posible, 1974; El desexilio y otras conjeturas, 1984; La cultura ese blanco móvil, 1989; La realidad y la palabra, 1991; El ejercicio del criterio, 1995; Memoria y esperanza: un mensaje a los jóvenes,  2004; Vivir adrede, 2007.]; al de revistas literarias [Marginalia, 1943 y Número, 1950.]; al escritor de semanarios y diarios [Marcha, 1945-1974; diario La mañana, 1964; revista de humor y caricaturas políticas Peloduro en 1964, diario El País de España.]; al militante [Movimiento contra el Tratado Militar con EE. UU., 1952; Crónica del 71, formó parte de la Coalición de izquierdas Frente amplio; Comisión Nacional Pro Referéndum, 1987-1989.]; al cuentista [Montevideanos, 1959; La muerte y otras sorpresas, 1968, 27ª edición; Con y sin nostalgia, 1977; Geografías, cuentos y poemas, 1984; Cuentos completos, 1986; Despistes y franquezas, 1989; Buzón de tiempo, 1999; El porvenir de mi pasado, relatos, 2003; Historias de París, 2007.]; al crítico de cine y teatro [escribió en La tribuna popular, 1965.]; al poeta y al de los poemas cantados [Sólo mientras tanto, 1950; Poemas de la Oficina, 1956; Inventario, Poesía 1950-1985, 31ª edición, y Poemas de hoyporhoy, 1963; A ras de sueño, 1967; Cuaderno cubano, 1969, también incluye artículos y entrevistas; Letras de emergencia, a Nacha Guevara y Alberto Favero, 1973; La casa y el ladrillo, 1977; Cotidianas, 1979; Viento del exilio, 1981; El sur también existe, cantado por Serrat, 1985; Preguntas al azar, 1986; Yesterday y mañana, 1988; Canciones del más acá, repertorio de más de cuarenta cantantes, 1989; Las soledades de Babel, 1991; Inventario dos, (1985-1994), 1994; El olvido está lleno de memoria, 1995; La vida ese paréntesis, 1997; Rincón de haikus, 1999; El mundo que respiro, 2001; Insomnios y duermevelas, finaliza con un cuento, 2002; Inventario tres: poesía completa 1991-2001, 2003; Existir todavía, Defensa propia: 60 poemas y 85 bagatelas y la antología poética personal Cincuenta sonetos, 2004; Adioses y bienvenidas: 84 poemas y 80 haikus, y el volumen misceláneo Estos poetas son míos, 2005; Nuevo rincón de haikus y Canciones del que no canta, 2006; Testigo de uno mismo, último libro publicado en vida del autor, 2008; Inventario cuatro, el último tomo de su poesía reunida, que no llegó a revisar, 2009.]; al dramaturgo [Pedro y el Capitán, 1979, 15ª edición; el teatro Ictus de Santiago de Chile adapta a la escena su novela Primavera con una esquina rota, 1984];  al de los diez años de exilio [Buenos Aires, 1973; Perú 1975, detenido y deportado, Cuba en 1976, Madrid 1977, Palma de Mallorca 1980, poemas y cuentos.]; o al del desexilio [Uruguay, 1983; revista Brecha, poemas y cuentos.] ; al novelista  [Quién de nosotros, 1953; La tregua, 1960, 75ª edición; Gracias por el fuego, 1965, 46ª edición; El cumpleaños de Juan Ángel, 1971, novela en verso, 30ª edición; Primavera con una esquina rota, 1982; La borra de café, 1993; Andamios, 1996.]; al autor de las obras llevadas al cine [La tregua, dirigida por Sergio Renán y candidata al Premio Óscar 1974; Pedro y el Capitán, 1984.]; al de las crónicas humorísticas [Mejor es meneallo, 1961, firmado como Damocles.].

O quizá al actor, sí actor, fue en la película El lado oscuro del corazón [1992], de Eliseo Subiela, ¡maravillosa! Poemas de Benedetti, Girondo y Gelman interpretados y dichos en primera persona, la voz del excelente Darío Grandinetti, Oliverio; ¡qué lujo! ¿lo recuerdas a Benedetti? era un marinero alemán recitando sus versos en un burdel. Uno de los más hermosos poemas: «Corazón coraza».









Corazón Coraza


Porque te tengo y no
porque te pienso
porque la noche está de ojos abiertos
porque la noche pasa y digo amor
porque has venido a recoger tu imagen
y eres mejor que todas tus imágenes
porque eres linda desde el pie hasta el alma
porque eres buena desde el alma a mí
porque te escondes dulce en el orgullo
pequeña y dulce
corazón coraza

porque eres mía
porque no eres mía
porque te miro y muero
y peor que muero
si no te miro amor
si no te miro

porque tú siempre existes dondequiera
pero existes mejor donde te quiero
porque tu boca es sangre
y tienes frío
tengo que amarte amor
tengo que amarte
aunque esta herida duela como dos
aunque te busque y no te encuentre
y aunque
la noche pase y yo te tenga
y no


Del libro Noción de patria [1962-63]


*     *     *


O el de los recitales... 



Concierto a dos voces, Benedetti y Viglietti: A dos voces
Grabado de la pantalla de TeveCiudad, canal de la Intendencia Municipal de Montevideo




Observar el número de ediciones, prueba más que elocuente de la enorme difusión y cantidad de lectores que lo siguen.
Benedetti fue un esritor prolífico realmente, y ha cultivado todos estos géneros: novela, cuento, poesía, teatro, periodismo, el ensayo político y literario, los discuros, las entrevistas, los artículos de humor y las letras de canciones.

Premiado, condecorado, galardonado, doctorados honoris causa,... distinguido con los más importantes honores, por su obra poética y ensayística, por su prosa, por su labor cultural, por sus aportes a la educación y al progreso de los pueblos, por su compromiso.




Recibe el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana el 24 de noviembre de 1999



Es difícil elegir una lectura, son tantas...

Cuando leo La tregua, o releeo en realidad, me doy cuenta que entro en algo más que un díario íntimo, a una lectura donde cada día nos invita, con prisa, al otro. Es que esas rutinas, ese día a día sin que nada resalte demasiado o sea digno de distinción, es como la tuya o la mía. Vidas anodinas a veces ornamentadas artificialmente, a veces genuinamente. Una tregua no se le niega a nadie.
Será porque Martín Santomé tampoco quiere parecer patético, será por la cercanía al ocio —regalo cruel de la edad— , o quizá por la vocación a la alegría.
Lo cierto es que esas rutinas también nos brindan felicidad y las historias familiares se parecen...
Es así como las reflexiones de Martín nos hacen hacerle gestos de coincidencia, es así como Benedettí me atrapa.

«Lo reconocible» también lo encontré en La borra de café, ...«mi familia siempre se andaba mudando»... y sí, hubo muchas casas, pero, ¡ay la de la calle Capurro!, esa fue especial para el joven, y yo disfruté de este universo literario creado con humor y poesía. Anécdotas en la vida de Claudio que identificaremos, momentos claves en la vida de un niño, adolescente que llega a adulto en la novela. Pero todas estas experiencias que comprende cualquier trayectoria de vida, van acompañadas por el arte de narrar y de crear un enigma con nombre Rita... El sexo y el erotismo, la infancia y sus espacios, la muerte y el amor, el dominio del propio destino. El final se presenta para nosotros, los lectores, con dar[nos] una respuesta.
A esta simple pregunta: ¿Dónde empezó el sueño?
Preguntas de Benedetti con respuestas insinuadas... Preguntas al azar.

—¿A dónde van las nieblas, la borra de café, los almanaques de otro tiempo?—, se había preguntado Julio Cortázar.


No sé si esto será algo personal, por lo que me gusta [es una necesidad en realidad], escribir sobre lo que leo, fijar esos trozos de vidas, descifrarlas y comprenderlas. Me refiero a ser conciente de esta necesidad y de su conveniencia.

 Claudio bucea en su memoria, se desdobla y se observa desde afuera, lee su vida. Claudio es un poco Benedetti. Es un poco nosotros y nuestros recuerdos, nuestras propias higueras fraternales llena de pájaros.

Y a Martín Santomé lo encontré escapado de La tregua. Sí, haciéndose el poeta y escribiendo...Colecciono pronósticos/ anuncios y matices/ y signos/ y sospechas/ y señales/ imagino proyectos de promesas/ quisiera no perderme/ un solo indicio...

La memoria es también nostalgia y refugio, o incomodidad y tristeza. Dice Benedetti en su ensayo Variaciones sobre el olvido: «El pasado es siempre una morada. Cuando nos mudamos al presente, a veces alimentamos la ilusión de que cerrando aquella casa con tres candados [digamos el perdón, la ingratitud o el simple olvido] nos vamos a ver libres de ella para siempre. Sin embargo, no podremos evitar que una parte de nosotros quede allí, coleccionando goces o rencores, trasmutando los momificados hechos, en delirios, visiones o pesadillas. Esa parte de nosotros que allí queda nos llama cada tanto, nos hace señales,...».

La memoria, o su vicario el subconsciente, dice en otro párrafo, acumula las imágenes que son nuestra identidad.
La memoria y el olvido es uno de los temas que más comparto con el escritor uruguayo, porque...


en el fondo el olvido es un gran simulacro


Y así llego al campo poético. Para Benedetti, «la poesía supone una transgresión, pues cuestiona toda una serie de supuestos sociales que el hombre debe poner en duda, y que a menudo forman parte de nuestro olvido cotidiano».

Estos conceptos los podemos leer en varios de sus ensayos, recogidos bajo el título El ejercicio del criterio, concretamente en «Los poetas ante la poesía» y «Rasgos y riesgos de la actual poesía latinoamericana».


El compromiso poético...


Ese gran simulacro


Cada vez que nos dan clase de amnesia
como si nunca hubieran existido
los combustibles ojos del alma
o los labios de la pena huérfana
cada vez que nos dan clases de amnesia
y nos conminan a borrar
la ebriedad del sufrimiento
me convenzo de que mi región
no es la farándula de otros

en mi región hay calvarios de ausencia
muñones de porvenir / arrabales de duelo
pero también candores de mosqueta
pianos que arrancan lágrimas
cadávares que miran aún desde sus huertos
nostalgias inmóviles en un pozo de otoño
sentimientos insoportablemente actuales
que se niegan a morir allá en lo oscuro

el olvido está lleno de memoria
que a veces no caben las remembranzas
y hay que tirar rencores por la borda

en el fondo el olvido es un gran simulacro
nadie sabe ni puede / aunque quiera / olvidar
un gran simulacro repleto de fantasmas
esos romeros que peregrinan por el olvido
como si fuese el Camino de Santiago

el día o la noche en que el olvido estalle
salte en pedazos o crepite /
los recuerdos atroces y los de maravilla
quebrarán los barrotes de fuego
arrastrarán por fin la verdad por el mundo
y esa verdad será que no hay olvido


Del libro El olvido está lleno de memoria


La lectura de este poemario no te va a dejar indiferente. Haber pensado, ilusoriamente, al olvido como un depósito desierto... y no comprender que el olvido está lleno de memoria, fue desconocernos.
Todo renace, se asoman los cielos que fueron apagados, algunos... esperan el momento, girando como satélites, son las buenas y malas sombras. 
Saber diferenciar a los olvidados de los olvidadores, podrá ser detectar la falsa amnesia. Si nunca pensaste en ello, quizá te, o me, ponga en guardia hacerlo. Por lo menos, no les haré la tarea fácil, y recordaré sus vilezas y fechorías. Yo también perdí la compasión en un casino: por eso les auguro y les propongo/ insomnios con plañidos puteadas mutismos/ cuerpos yertos desnudos nunca más seductores/ ojos empecinadamente abiertos...¹.

Porque eso es la memoria y el olvido, es la sorpresa de ¡cómo desamoraron los amores!, son las nomeolvides que añaden azul a mi memoria², son los hermanos desfraternizados... que decidieron lavarse de mágicas penurias³.



El lector...
Benedetti también fue un gran lector, un lector atento y exhaustivo, al que le apasionaba «buscar el verdadero rostro del escritor». En su juventud; escritores europeos; en cambio, la toma de conciencia política estuvo acompañada por los autores latinoamericanos.

Como crítico, defiende, ante todo, su derecho a ejercitar con libertad su capacidad interpretativa. No quiso plegarse a un modelo de análisis, desentendiéndose de categorías y asumiendo la perspectiva del lector. En uno de sus ensayos, hasta habla del «mero lector feligrés», el que se conmueve, en el intelecto o en la entraña.

Pero el escritor de ficciones y poesía, tiene una postura que deja lo que lee afuera de lo que escribe. Que es un hombre hecho de literatura, lo hace evidente en sus conferencias y ensayos, por ejemplo; pero en sus creaciones, evade la intertextualidad, deja para otros ámbitos su intelectualidad. Esto no quiere decir que un lector atento no encuentre rastros de su amplio bagaje literario: José Martí, José Rodó, César Vallejo, Pablo Neruda, Benito Pérez Galdós, Miguel de Unamuno, Antonio Machado, Rafael Alberti, etc.  

Benedetti se ubica cerca del lector, «se sienta en la platea, lejos del púlpito, encuentra la cercanía que busca, la complicidad no del escritor, de la academia o de los otros críticos, sino la del lector para quien escribe con toda sinceridad, pero también con toda la destreza necesaria».


Las relecturas, donde la memoria indómita juega un rol de creación [o construcción, si creación es mucho decir], donde el tiempo fragmenta las historias inevitablemnte, donde la valoración es un recuerdo, suelen ser una posibilidad para salir de lo anecdótico e ir, si tenemos suerte, a lo esencial, a lo más profundo... aunque nos desconcierte.
Vuelvo a ver, como poesía, compromiso y amor se entrecruzan continuamente en esta vasta obra.

—¿Qué significa Benedtti para vos?—, vuelvo a preguntarte, a preguntarme.
Sé que existe una complicidad afectiva entre sus lectores, los benedettianos. Todos nos consideramos un poco sus amigos, y amigos entre nosotros.
Esto fue sólo una parte de lo que significa para mí, que lo descubro cada vez, y eso me sorprende, aunque ya tendría que saber que me espera con un nuevo recibimiento.
Dedicado a él y a sus lectores, en el día de su cumpleaños, en este día que festejo su inmenso regalo y le agradezco esta entrañable


Bienvenida


Se me ocurre que vas a llegar distinta
no exactamente más linda
ni más fuerte
ni más dócil
ni más cauta
tan sólo que vas a llegar distinta...




C. G.




Mis notas:


- «El puente»: [extracto] poema del libro Preguntas al azar. Escrito entre 1984y 1985, es, como dice su dedicatoria, «un brindis por el regreso». Coincide con el final de la dictadura militar iniciada en 1973 y con su vuelta a Uruguay.
«...ahí está el puente,/ para cruzarlo o para no cruzarlo/ yo lo voy a cruzar/ sin prevenciones/ en la otra orilla alguien me espera...».


- La tregua: [1960] Novela que transcurre en Montevideo y escrita a la manera de diario personal, por su protagonista, Martín Santomé, de 49 años. Es un hombre viudo que tuvo que hacerse cargo de la crianza de tres hijos: Esteban, Jaime y Blanca. Trabaja en una vieja empresa de repuestos de automóviles, haciendo un trabajo rutinario de «ejercicios financieros poco interesantes», y está cercano a jubilarse. Algo sucede relacionado a su vida amorosa...
Leerla completa:
http://www.portalalba.org/biblioteca/BENEDETTI%20MARIO.%20La%20Tregua.pdf

- La borra de café: [1992] Novela publicada en Madrid. Ambientada también en Montevideo, Uruguay, relata la historia de Claudio: es la infancia, las mudanzas y la casa de Capurro con sus olores y el despertar con los pájaros, es el barrio y los amigos: esos pequeños héroes..., los padres, difernte uno de otro, es la maestra particular y el descubrimiento de sus atractivas piernas, es el fútbol, el Dandy y su muerte, es Mateo Recarte, ciego, y su hermana María Eugenia, bellísima, son los miedos y los misterios, y es Claudio creciendo y viéndoselas nada menos y nada más que con la vida.
Loa capítulos tienen los siguientes nombres, ¿cuál de ellos preferimos? ¿cuál de ellos recordamos?: Las mudanzas, Primeros auxilios, Aquel naufragio, Un parque para nosotros, El dirigible y el Dandy, Pro y contra de la osadía, Un espacio propio, Soñar en colores, Los de Galarza, Safari al centro, Malas noticias, La niña de la higuera, Adiós y nunca, Juliska habla castellano, Fiesta en el barrio, El parque estaba desierto, Hasta la vista, incompatibilidades, El buen trato, Gente que pasa, Las iniciales, Mi segundo graf, Pobre pecador, Hoy estreno hoy, Espaldarazo, La niña de la higuera [2], Bienvenida Sonia, Las tres y diez, El surco del deseo, Mujer del más acá, ¿Para qué hablar?, Las constancias del viudo, Pies en polvo rosa, Voces lejanas, No siempre es así, Otra vez Mateo, Un milagro, El capital es otra cosa, Juliska se pone triste, Pretérito imperfecto, La antigua más nueva, Primer subsuelo, No va más, Toda esa guita, Ese poco de equilibrio, Mi Nagasaki, Frittatine ai quattro sapori y La borra del café.

Leerla completa:
http://www.bsolot.info/wp-content/uploads/2011/02/Benedetti_Mario-La_borra_del_cafe.pdf

Variaciones sobre el olvido: Ensayo sobre el pasado, las raíces de la infancia, la imposibilidad de  hacer de cuenta que algo nunga existió [...]. «La infancia no sólo está para ser contemplada, tal como si se recorriera un viejo álbum de fotografías en sepia; más importante es descubrirla, comprenderla, descifrarla, detectar dónde comenzó una esperanza, dónde fue sembrado un desaliento, provocada una animadversión».

http://elpais.com/diario/1987/09/06/opinion/557877611_850215.html

- El olvido está lleno de memoria: poemario publicado en 1995, dedicado «A luz, como siempre». Compuesto por las siguientes partes: El olvido está lleno de memoria, El porvenir de mi pasado, Aguas juridiccionales, Tristezas/ Alegrías, Distancias, Semáforos, El amor es un centro, Re/creaciones y Addenda.

http://exwebserv.telesurtv.net/secciones/afondo/especiales/Mario_Benedetti/pdf/POESIA-El_olvido_esta_lleno_de_memoria_%281995%29.pdf


-¹ «Olvidadores», extracto. Poema del libro El olvido está lleno de memoria: «...por eso les auguro y les propongo/ insomnios con plañidos ... ».


-² «Nomeolvides», extracto. Poema del libro El olvido está lleno de memoria: «por fin tuve un harén de nomeolvides/ y no puedo olvidarlos porque añaden/ azul a mi memoria».


-³ «Variaciones»: Poema del libro El olvido está lleno de memoria.


Variaciones


Sé que algunos hermanos se enmendaron
se desfraternizaron/ se perdieron de vista
sin apelar a prórrogas
decidieron lavarse de mágicas penurias
y lejos/ en la cueva del olvido
su primavera quedó haciendo señas

ni bien esos hermanos aprendieron
a volar con las alas del desdén
su egoísmo se volvió sereno
ahora un poco huérfanos
y con su amor sin labios
por el miedo vacío van a tientas
rezan ciérrate sésamo y que sea
para siempre en el acre porvenir

ex hermanos/ sin bregas ni delirios
hastiados de querer al árbol leña
devotos de su ombligo y escondiendo
bajo el telón del párpado
la dulce antigua falta

saben/ y desde siempre lo han sabido
que en su rampante soledad no caben
los abrazos del prójimo y la lluvia
los abrazos del sueño
los abrazos


*     *     *


Como habrán observado, Benedetti es un poeta que, a menudo, prescinde en sus poemas de los signos de puntuación y de las mayúsculas.
Licencias literarias y poéticas propias del poeta, aceptadas y aceptables. Dijo Benedetti: «Escribo sin signos de puntuación sólo en la poesía porque me parece que queda más libre y despojada, pero en la prosa sigo empleando los signos de puntuación porque allí me parecen imprescindibles».


- Preguntas al azar: poemario; dice la dedicatoria: «a luz/ este brindis/ por el regreso»; integrado por ochenta poemas y algunas canciones; escrito, casi en su totalidad, durante los años 1984 y 1985. Cuando escribe «luz», ya sabrán que se trata de su gran amor, compañera de vida durante 60 años, Luz López Alegre.

http://www.bsolot.info/wp-content/uploads/2011/02/Benedetti_Mario-Preguntas_al_azar.pdf


- «Meneallo»: expresión criolla, mejor no meneallo, significa: mejor no moverlo, mejor dejarlo como está.


- El aguafiestas. Biografía de Benedetti: de Mario Paoletti, 1996.


- La noche de los feos: uno de los cuentos más elogiados de Benedetti. Es la hermosa historia de dos seres deformes que deciden cambiar el rumbo de sus vidas conociéndose. Nos puede llevar a pensar en un tema actual, en los conceptos de belleza, y en los efectos psicológicos, emocionales y afectivos, en la aceptación del otro y en los estereotipos.
Texto completo: http://www.ciudadseva.com/textos/cuentos/esp/benedett/la_noche_de_los_feos.htm


- «El interrogador»: poema de Julio Cortázar. No pregunto por las glorias ni las nieves,/ quiero saber dónde se van juntando/ las golondrinas muertas,/ adónde van las cajas de fósforos usadas./ Por grande que sea el mundo/ hay los recortes de uñas, las pelusas,/ los sobres fatigados, las pestañas que caen./ ¿Adónde van las nieblas, la borra de café,/ los almanaques de otro tiempo?/ [...].


- «Bienvenida»: poema del libro Poema de otros. La parte: De otros diluvios. 


- «Todo lo contrario»: poema del libro Poema de otros. La parte: Los personajes, Martín Santomé


- Fundación Mario Benedetti: abrió sus puertas el 1° de diciembre de 2015.
 http://www.fundacionmariobenedetti.org/